Empecé a jugar Immortals: Fenyx Rising hace poco menos de una semana. En ese tiempo, he vivido obsesionada con ganas de solo volver a su mundo y seguir explorando.

Aquí les cuento algunas de las cosas que pienso sobre el título, con la advertencia de que aún no termino el juego.

He estado jugando en PlayStation 5, y como en Spider-Man Miles Morales, las pantallas de carga son casi inexistentes. Sí quizá hay que esperar unos segundos cuando haces fast travel, pero wow, el mundo sin pantallas de carga es increíble.

1.

El mapa es gigante y a diferencia de otros títulos de Ubisoft más realistas, en realidad te da ganas de explorarlo. Por todos lados hay pequeños retos, templos y cositas que hacer, y aunque no las haya, al menos habrá una foto bonita que tomar.

2.

Oye Cat, y ¿sí se parece un chingo a The Legend of Zelda Breath Of The Wild? Sí y no. Es decir, se nota la inspiración mucho, sí, pero el juego no se siente igual. La historia de Fenyx es una más focalizada. Es decir, las misiones centrales a la historia están mucho más marcadas y sabes a dónde ir para jugarlas. Vamos, en BOTW bien podías ir a las bestias celestiales o irte a buscar un caballo bonito, o ir a buscar memorias, y nada de eso (más que las bestias claro) estaba marcado en el mapa. La exploración era la recompensa. Aquí hay muchas cosas que descubres, sí, pero se siente mucho más guiado que BOTW. Esto no es una queja, es solo un juego diferente. Y como les decía arriba, Fenyx sí tiene esa maravilla de descubrir cosas por ti mismo.

3.

Tan bonito

Visualmente es muy bello, y la inspiración griega lo hace lucir único y distinto. Sobre todo muy diferente a los juegos más realistas de Ubisoft. Si ya estabas hasta la madre de los 80 Tom Clancy’s distintos, quizá aquí encuentres algo para ti. Éste es un Ubisoft colorido y mágico, que no se toma muy en serio a sí mismo. La neta, es un Ubisoft que me gusta.

4.

La historia tiene de narradores a Zeus y Prometeo, y si bien algunos diálogos están mejor logrados que otros, en general me han dado mucha risa y me ha dado gusto escucharlos. Prometeo es un narrador “serio” y Zeus lo interrumpe con comentarios bobos. Está tierno.

5.

Otra cosa que me gusta mucho de la narración es que cuando encuentras algo particularmente interesante en el mapa o terminas un pequeño reto, Prometeo te cuenta cachitos de mitología griega. Si pasaste, como yo, por ese etapa de fanatismo absoluto de la mitología griega, esto te va a encantar.

6.

Ahora bien, sobre los retos en el mapa. Hay un montón de cosas que hacer. Por ejemplo, hay pequeños retos que son carreras, otros en los que tienes que ser muy hábil con tu arco, otros más que son pequeños puzzles para armar imágenes y algunos musicales (increíbles). También hay cofres que tienes que descubrir cómo abrir o vencer enemigos para que se abran. En general, me la he pasado muy bien, solo caminando por ahí y encontrando cosas qué hacer. Si eras de los que decía que en BOTW no había nada qué hacer… bueno, eso no te va a pasar aquí.

7.

El combate está bien, a secas. No es mi parte favorita del juego por ahora, y siento que gracias a las habilidades que puedes ir desbloqueando (con una moneda que te da cumplir retos en el mapa) te pones fuerte y hábil rápido. No es que todos los enemigos vayan a ser súper fáciles, y claro que me vencieron en ocasiones, pero al final no se siente imposible.

8.

Hay enemigos legendarios. Un poco como los bosses más complicados de BOTW, aquí encontrarás enemigos muy fuertes a lo largo del mapa. Y pues sí, están más difíciles pero no son súper imponentes como en BOTW. En general creo que el juego va poco a poco con el jugador. Quiero decir, claro que solo podría irme a otras áreas y encontrar allá todo esto, pero como las zonas están muy delimitadas, es más sencillo ir en orden y toparte con las cosas en orden. De ese modo, es raro que te encuentres con enemigos para los que no te sientas preparado.

9.

¿Y qué hay de los dungeons? Bueno, están muy divertidos. La verdad me la he pasado increíble resolviendo puzzles en las cámaras del Tártaro. Sé que igualmente aquí ha habido mucha comparación con BOTW, pero en realidad no siento que se parezcan tanto.

Las cámaras del Tártaro usualmente son puzzles más largos que las de BOTW. No por esto más difíciles, pero en lugar de tener una habitación que resolver, aquí tienes varias. Resolver cada uno de estos te dará poder para aumentar la resistencia de Fenix, cosa que necesitas para combatir mejor o simplemente para escalar y nadar por más tiempo.

También hay Cámaras del Tártaro un poco más largas y complicadas que están relacionadas a la historia central.

10.

¡Hay mucha ropa! Y puedes cambiarte de ropa, pero quedarte con los poderes de otra. Nice.

11.

Fenyx me cae bien. Es un héroe muy del tipo: sí a huevo, voy a salir a hacer esto, aunque a veces tiene momentos de duda, se sobrepone a ellos y sigue luchando.

Al final, por ahora Immortals: Fenyx Rising me encanta. Todavía hay muchas áreas en el mapa a las que no he ido, pero de verdad sólo quiero seguirlo jugando. Y miren, entiendo las comparaciones con BOTW, pero en realidad creo que aquí Ubisoft sí creó algo distinto y único.

Y ahora, véanme en mi majestuoso venado

Ve gameplay de Immortals: Fenyx Rising

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